Este fin de semana, la Policía Municipal y el área de Fiscalización revisaron los permisos y las condiciones para operar de bares y cantinas del centro histórico en los horarios de mayor afluencia y así preservar un ambiente de seguridad para el personal y los clientes de cada establecimiento.
Al operativo verificador se sumó la Dirección General de Medio Ambiente y Ordenamiento Territorial, ya que también se midió la intensidad del sonido en cada uno de los puntos visitados para emitir recomendaciones de regulación.
Entre otros aspectos, el equipo municipal de revisión verificó la validez de las licencias de venta de bebidas alcohólicas, las medidas de seguridad interna de los establecimientos y el apego a los horarios establecidos para el funcionamiento de expendios de este tipo, así como el hecho de garantizar que se cumpla con la orden de no dar acceso ni vender alcohol a menores de edad.
Aunado a la supervisión nocturna en bares y cantinas, la Policía Municipal llevó a cabo acciones derivadas del operativo ‘Descuelgue’ en diversos callejones aledaños al centro, como Gavilanes, El Venado, Cruz Verde y De la Mora.